ESTRUCTURA EXPUESTA:
CASO DE ÉXITO EBC

Por: Arq. Gustavo López Padilla



En buena medida, los países desarrollados han cimentado el bienestar de su población apoyados en la educación pública, traduciendo lo anterior en una realidad cotidiana, que muestra buenas calidades de vida para el conjunto de sus habitantes. Se trata de una educación crítica, abierta, respetuosa, interactiva, promotora de valores humanos, experimentando metodologías didácticas que se apoyan en medios avanzados de comunicación del conocimiento.

Estas mismas sociedades tienen en cuenta la importancia, de que para que esta educación de calidad pueda desarrollarse en las mejores condiciones, es necesario disponer de unas instalaciones educativas, que cuenten con condiciones espaciales tales, que propicien o alienten la dinámica de enseñanza aprendizaje. Saben que la calidad y variedad de los espacios educativos, generan conductas entre los educandos y educadores y así las cosas, se preocupan por contar con espacios eficientes, funcionales, confortables, bellos, variados, flexibles y divertidos.


En este orden de cosas, la Escuela Bancaria y Comercial, consciente de su compromiso educativo para con los jóvenes que acuden a sus instalaciones y en su afán de brindarles las mejores condiciones para desarrollar sus estudios y capacidades, emprendió desde hace por lo menos veinte años, un programa constante y ambicioso de mejoramiento, expansión y diversificación de sus planteles o campus, en distintas entidades del país, acompañando lo anterior con la actualización de sus programas y metodologías de enseñanza.

Como parte de lo anterior, en el mes de abril del 2018, fueron inauguradas las instalaciones del nuevo Campus ciudad de México, ubicadas en la calle de Liverpool No. 54, haciendo esquina con Dinamarca, en la colonia Juárez, de la Alcaldía Cuauhtémoc. Previamente a unas cuadras del recién inaugurado campus, en la esquina de Hamburgo y Dinamarca, en la misma demarcación política, la EBC abrió las puertas de su Escuela de Posgrado en el año 2003 y en la misma calle de Liverpool, en su número 57, un edificio de estacionamientos en el año 2016.

Este conjunto de proyectos fueron diseñados por el arquitecto Gustavo López Padilla, quién forma parte del grupo SAYA + Arquitectos, haciendo equipo con los también arquitectos Luis Sánchez Renero, Félix Sánchez Aguilar y Fernando Mota Fernández, contando además con la activa colaboración de los arquitectos Joel Damian Villa, Citlali Ovando, Alfredo Hernández, Graciela Díaz del barrio, Angélica Becerra e Iris Youali Aguilar, siendo fundamental la participación estrecha de las propias autoridades representativas de la EBC para la realización de los proyectos.

Los resultados obtenidos son consecuencia de un estrecho y constante trabajo en equipo, que incluye desde luego al conjunto de los constructores implicados en las obras, entre los que destaca el Ing. Carlos Ferreiro, especialista en estructuras metálicas.


En términos urbanos, la proximidad entre las instalaciones educativas mencionadas, conforma un sistema educativo y edificatorio, que se integra y relaciona con naturalidad, a la vida colectiva del barrio donde se ubican. Coadyuva a lo anterior, el hecho de contar con cuatro niveles construidos sobre el nivel de la calle, una densidad media de construcción, la condición de que los predios dedicados a los dos edificios educativos, cuentan con una esquina dominante y el que ambas soluciones arquitectónicas de los proyectos, además de tomar en cuenta esta condición de esquina, se presentan abiertos, transparentes, fluidos, dejando ver hacia el exterior, hacia la calle, la vida y las actividades educativas que se desarrollan en su interior.

Los edificios de la EBC que están en el barrio de la colonia Juárez, enriquecen la vida colectiva del lugar y del conjunto de la ciudad. Son obras que cuentan con una escala y una presencia urbana amables, que hacen ciudad. Se suma a lo anterior, el que entre las tres instalaciones, sumando el edificio de estacionamientos, se puedan hacer recorridos a pié y su cercanía con importantes calles y avenidas de la ciudad, como lo son Ave. de los Insurgentes, el Paseo de la Reforma, ave. Chapultepec o la calle de Niza, posibiliten disponer de las facilidades de transporte público y movilidad, que esta zona de la ciudad de México ofrece, tales como el metro, el metrobús, rutas de camiones y desde luego estaciones y carriles de bicicletas.

El barrio de la colonia Juárez en su conjunto, cuenta con edificaciones en las que conviven distintos periodos históricos, con usos del suelo diversos y complementarios como restaurantes, oficinas, centros culturales, oficinas administrativas, otras escuelas, lugares de entretenimiento y sobre todo calles caminables, reflejando la condición e intensidad de la vida urbana colectiva y mezclas de usos del suelo, que caracterizan a las modernas ciudades contemporáneas.



Desde el punto de vista arquitectónico, el nuevo campus EBC ciudad de México representó un reto de diseño, en el sentido de lograr una vez mas su propia identidad, pero que al mismo tiempo significara una nueva contribución para consolidar la imagen corporativa de la institución, reinterpretando algunos componentes compositivos y formales, previamente experimentados en otros campus de la propia Escuela, de tal manera que el público en general siga identificando con claridad a la EBC.

El conjunto de los edificios ubicados en esta ciudad, nos muestra escuelas semejantes, complementarias pero distintas, aprovechando y mejorando en cada oportunidad las experiencias previas.

Como constantes en el campus ciudad de México, se ordenan los requerimientos de programa en relación al criterio de patios, que cuentan con diferentes escalas y condiciones habitables, patios pensados como lugares de distribución y encuentros, con vistas y relaciones claras, francas hacia la calle, buscando siempre aprovechar al máximo la luz natural.

La disposición eficiente de los distintos componentes de programa, con base en el criterio proyectual de plantas libres y la solución estructural predominantemente metálica del edificio, permite la máxima flexibilidad en la subdivisión y utilización del espacio, que se puede reconfigurar con facilidad, tomando en cuenta en paralelo, las nuevas y dinámicas metodologías educativas.



La propuesta metálica de la estructura en el edificio, permitió con su producción seriada en fábrica, garantizar los tiempos y calidad de ejecución de la obra.

En términos de imagen urbana y arquitectónica, todos los componentes metálicos estructurales se muestran de manera aparente, muy expresiva, formando parte de lo que se identifica arquitectónicamente como la estética de la técnica o high tech, en donde son fundamentales y prioritarias las soluciones de detalle, sobre todo en lo que tiene que ver con las conexiones necesarias entre columnas, trabes e incluyendo los entrepisos.

Se priorizaron también en el diseño de la escuela, las propuestas de escaleras y puentes necesarios, también metálicos, para facilitar la movilidad de la comunidad al interior de la institución.

El criterio de materiales metálicos expuestos, se combinó con la eliminación de plafones en la mayoría de los espacios interiores, haciendo viajar las instalaciones necesarias también de manera visible, lo que facilita su funcionamiento y sus posibles reparaciones, reduciendo al mismo tiempo sus costos de operación, con todos los beneficios financieros que lo anterior implica.



Formando parte del compromiso social y educativo de la EBC para con la ciudad, el país y el planeta, en este nuevo campus se volvieron a experimentar, mejoradas, soluciones de carácter ambiental, sustentables, que ya desde hace varios años han caracterizado los distintos campus de la institución. Hablamos de aprovechar la luz natural, racionalizar la utilización de energía con base en equipos y componentes de bajo consumo y máxima durabilidad en el tiempo, regular las incidencias del sol y sus ganancias de calor mediante el criterio de dobles fachadas y utilizando aire acondicionado solo en zonas indispensables.

Se suman a lo anterior, el reutilizar el agua de lluvia, reciclar en buena medida las aguas residuales, regular la producción de basura y contar con zonas verdes al interior del edificio que mejoran las condiciones interiores de habitabilidad y ambientales, al tiempo que contribuyen a la salud y propician conductas amables de los ocupantes de la escuela. Las aulas como unidades base de la escuela, son variadas en cuanto a sus dimensiones, pero semejantes en cuanto a contar con suficiente luz natural, ventilación natural cruzada, regulando el ruido ambiental y el del interior de las mismas, con soluciones acústicas de detalle y uso de materiales, que procuran que las clases cotidianas se desarrollen en las mejores condiciones de confort.



En términos de programa de necesidades el Campus ciudad de México, cuenta con 11,689.00 m2 construidos, distribuidos en controles de acceso, salones de clase de disposiciones y tamaños diferentes, salones de usos múltiples reconfigurables, biblioteca-centro de información y cómputo, oficinas administrativas, gimnasio, circuito para correr y caminar, dos cafeterías y sobre todo patios, puentes y terrazas con condiciones de uso y ambientes diferentes, ubicados a distintos niveles, que desde diversas perspectivas fomentan la vida colectiva y la posibilidad de intercambio de información y experiencias de vida.

En el nivel de acceso, articulando secuencialmente los patios principales, se establece un recorrido peatonal a manera de una calle interior, que articula todo el conjunto y posibilita la relación entre las calles de Liverpool y Marsella.

Como se ha mencionado, la edificación está resuelta con base en una estructura metálica atornillada, sistemas de pisos de losacero aparentes, muros divisorios acústicos reconfigurables, otros de block de cristal, instalaciones en general expuestas, propiciando la posibilidad de su fácil mantenimiento o el que puedan ser modificadas o sustituidas por aquellas más avanzadas en el tiempo. Los materiales empleados en la construcción, son en su mayoría aparentes, de bajo mantenimiento y solo algunos complementarios como maderas, telas y cerámicas, califican algunos lugares en lo particular.



En sintonía con las mejores ciudades e instituciones educativas en el mundo, la experiencia del campus ciudad de México, se suma a otros de la misma EBC, como los de Hamburgo y Dinamarca, Tlalnepantla, Toluca, Querétaro, León, San Luis Potosí y Mérida, diseñados todos por los mismos autores, con base en estructuras metálicas expuestas, logrando consolidar una red nacional educativa, que cuenta con una imagen corporativa que identifica a la institución, que se ha caracterizado por preocuparse por el confort, eficiencia, funcionalidad, calidad, variedad y flexibilidad de los espacios que se ofrecen a sus alumnos, profesores y personal administrativo, como una condición esencial para un adecuado y amable aprendizaje.